¿Por qué se parecen los perros a sus dueños?

Te sorprenderás por qué los perros se parecen a sus dueños

Cuando una persona adopta a una mascota es muy probable que elija uno que se adapte a su rutina e increíblemente desde esa selección se hace lo más parecido a sus dueños. Se pueden escoger desde los animales de compañía más juguetones hasta los más tranquilos de personalidad, pero sin duda, es que se puedan parecer a sus dueños.

Si bien los perros cuentan con su propia personalidad ellos también estarán influenciados por la de sus dueños. Aquí es importante considerar las adaptaciones que éstos le hagan a sus animales de compañía, como por ejemplo compartiendo prendas similares o incluso el peinado afro o lacio que algunos puedan tener.

Es gracioso que los perros se parezcan a sus dueños más allá de estas características porque además pueden ser físicamente muy similares o hasta en el tono de piel/pelo podrían tener esos parecidos. De hecho, se dice que por increíble que parezca, éste puede ser mayor al que se encuentra entre matrimonios y amigos.

La idea de cuestionar si los perros realmente se parecen a sus dueños no es del todo descabellada y también habría que tomarse en cuenta el tiempo del vínculo que se puede llegar a tener con ellos el cual pueden ser muchos años.

Si bien la domesticación de los lobos es de mucho tiempo atrás el análisis de nuestra convivencia con los animales de compañía es más reciente. Algunos estudios han demostrado que una persona agradable tiene más probabilidades de tener un perro activo e inquieto, o por lo menos, menos agresivo. Por otro lado, alguien con una personalidad más inestable emocionalmente podría tener perros más reprimidos, pero si es una persona tranquila, su perro también será tranquilo.

También con la dinámica de la convivencia se va determinando el comportamiento de nuestra mascota; se pueden adiestrar por medio de alguna escuela especializada en ello o con las instrucciones básicas que se le enseñen en casa, ejemplo de ello es que conozcan el área para hacer sus necesidades, el lugar dónde saben les darás su alimento o cuando tomas su correa antes de salir de paseo y deben relajarse un poco.

No cabe duda que nuestros animales de compañía se parecen a nosotros y que siempre nos corresponden con sus caricias, mordidas y afectos que en cierta medida también son un reflejo de nuestra personalidad. Así que en tus próximas vacaciones no dudes en tomarte muchas selfies y compartirlas.